Pilatti Vergara, a favor de la declaración de la Emergencia Alimentaria

Ante la crítica situación que vive la Argentina debido a las políticas económicas de ajuste que impactan necesariamente en las poblaciones más vulnerables, especialmente los niños, niñas y adolescentes; la senadora por el Chaco, María Inés Pilatti Vergara, se expresó sobre el pedido de diferentes sectores para declarar la emergencia alimentaria.

Ante la crítica situación que vive la Argentina debido a las políticas económicas de ajuste que impactan necesariamente en las poblaciones más vulnerables, especialmente los niños, niñas y adolescentes; la senadora por el Chaco, María Inés Pilatti Vergara, se expresó sobre el pedido de diferentes sectores para declarar la emergencia alimentaria.

En esta línea la legisladora puntualizó, que desde el año pasado vienen alertando la necesidad, en este contexto de crisis económica, de aumentar los recaudos para garantizar la alimentación adecuada de nuestros niños y niñas.

“De Ismael Ramírez a Vicente Ferrer, una gestión ensañada con los más débiles, sucesos que no se generaron de una manera espontánea sino que son respuesta a políticas implementadas por el ‘mejor equipo de los últimos 50 años‘ que a través de los recortes a la asistencia social, el congelamiento de las paritarias, los tarifazos que comieron los salarios, la escandalosa devaluación del peso, las decisiones económicas que causaron el cierre permanente de fábricas y los despidos masivos; lejos de su tan mentada promesa de campaña de Pobreza Cero logró una Argentina con más exclusión, más pobreza, más hambre, inseguridad y desempleo. La heladera no miente, el bolsillo de los trabajadores no miente. La crisis se ensaña con los más vulnerables, afectando sobre todo a los más pequeños” sostuvo.

“La política como el arte de lo posible, como el ejercicio de poder que altera comportamientos y percepciones, que atiende intereses, jerarquizando algunas demandas sobre otras, en sintonía con lo que se percibe como urgente o al menos prioritario, no puede desvanecerse. El neoliberalismo del gobierno al menos debiera dar cuenta de una máxima ideológicamente intrínseca: la gestión por resultados. No puede ser que, con estos indicadores sociales, no estemos dinamizando en el Congreso de la Nación una canasta de políticas públicas que estén orientadas al umbral mínimo de bienestar”.

No se trata de una discusión partidaria o ideológica: hoy en la Argentina hay consonancia programática entre los principales actores políticos u organizaciones sociales respecto de la tan mencionada emergencia alimentaria (Frente de Todos, Consenso 2019, organizaciones de base del centro a la izquierda, iglesias y congregaciones, sindicatos, entre otros).

Un claro ejemplo se halla en los informes de la UCA: destacaron que el 28,1% vive en hogares con necesidades básicas insatisfechas y que, como consecuencia de ello, el 33,8% de esos/as niños/as desayuna, almuerza y merienda en comedores escolares o de organizaciones barriales. En su informe alerta que, durante el último año, hubo un aumento de casi 8 puntos en la cantidad de chicos y chicas que deben acudir a organizaciones educativas y sociales.

En el Chaco, la situación no dista de la realidad nacional. Según un informe de ISEPCI Chaco, en base a un relevamiento en 32 merenderos y jardines de infantes aumentó drásticamente la cantidad de niños en merenderos al tiempo que revelan un alto grado de mal nutrición. Según manifiesta el equipo que realizó el relevamiento, “comparado con el primer semestre de 2017, el dato llamativo es el gran incremento de niños y jóvenes que asisten.
“En este contexto sin dejar de reconocer la labor que lleva adelante la sociedad civil, las organizaciones barriales, políticas, la Iglesia en los merenderos y comedores barriales; la situación de emergencia alimentaria por el alto costo de los alimentos y disminución de los ingresos formales e informales llevaron a que estos espacios se encuentran desbordados y debemos dar una respuesta”.

En este sentido manifestó que acompañada por sus pares del Bloque presentó un Proyecto que crea el Programa Nacional de Alimentación Infantil Escolar, con el objetivo de garantizar una alimentación de calidad para todos los/as alumnos/as de inicial y primaria, de las escuelas públicas, de gestión social y privadas con subvención total.

“Debemos garantizar que los niños y niñas coman en la escuela y no sólo que coman, sino que esa comida sea de calidad, ya que en muchos casos ese es el único alimento que reciben en el día. Algunas provincias realizaron avances y definieron guías de alimentación saludable, por eso debemos promover que se sienten las bases de una buena alimentación, pero, lo que es más importante, debemos garantizar los recursos” sostuvo.

El Gobierno de Mauricio Macri, tiene a cuestas la experiencia de vetar la Ley de Emergencia Ocupacional, la Ley de Emergencia Tarifaria, el salario mínimo profesional, entre tantos ejemplos de su “vetocracia”. Los resultados calamitosos en materia de salarios, empleo y servicios públicos solo pueden confirmar que las afirmaciones de “mala praxis” son benevolentes: la administración a partir de legislación favorecida y legislación obstaculizada generó el deterioro total necesario para asentar en la agenda pública la discusión de reformas “inexorables” pero contrarias a los intereses y derechos populares.

“El problema es que su aislamiento y confianza en la paciencia social ante la pauperización de la vida cotidiana, nos llevó a este escenario en el cuál no se garantiza el consumo de nutrientes necesarios para el desarrollo de nuestros niños. El gobierno que se cansó de hacer propaganda de la supuesta política de “primera infancia” del siglo XXI no puede hoy bloquear y/o vetar iniciativas que apuntalen el mismo nicho o población target. Hay que apartar la miserabilidad de lo político de una vez por todas” concluyó Pilatti Vergara.

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