Los pasillos y oficinas del Congreso y sus anexos lucen despoblados, en una imagen que se replica a lo largo y ancho del país por el avance del coronavirus y las medidas para prevenirlo. En el caso de la Cámara de Diputados, las disposiciones adoptadas arrojaron hasta el momento resultados contundentes, que están a la vista.
Según información actualizada a las 10 de la mañana de este martes, se otorgaron en total 1.486 licencias excepcionales, de las cuales la mayoría (498) corresponden a personas de 60 años o más. Las demás licencias fueron cedidas a trabajadores que viajaron al exterior y deben cumplir la cuarentena (100), embarazadas y puérperas (39), empleados con patologías crónicas (566) y diabéticos con cobertura médica (205).
Los datos surgen de un informe que este martes le entregó el presidente de Diputados, Sergio Massa, al ministro de Salud, Ginés González García, en el marco de una reunión con jefes de bloque en el Salón de Honor, donde se evaluó cómo continuar con la actividad parlamentaria.
En el documento también se evaluó el presentismo y se detectó que, en relación a los últimos dos lunes del mes de marzo, la asistencia del personal de la Cámara este lunes se redujo en promedio un 44%, producto de las recomendaciones, las licencias, el teletrabajo y las restricciones aplicadas de forma preventiva. En la Cámara estiman que en los próximos días el número de inasistencias será mayor.
El informe también ofrece un dato relevante: hay actualmente 75 diputados y diputadas que tienen 60 años o más; es decir, el 30% de la Cámara es población de riesgo. En el Frente de Todos, los legisladores en esta condición son 36, mientras que en el Pro y la UCR hay 12 por igual.
En la Coalición Cívica, en tanto, son siete; en Consenso Federal, dos; en Córdoba Federal, también dos; y en el Frente de la Concordia Misionero, uno. Cierran la lista de diputados de 60 años o más Luis Di Giacómo (Juntos Somos Río Negro), Alma Sapag (Movimiento Popular Neuquino) y Virginia Cornejo (Pro).
