“Somos pequeños empresarios y artesanos que dependemos de mucha mano de obra que se nos encarece y no podemos quedar atrás de la inflación porque vamos a terminar trabajando a pérdida”, sostuvo López en diálogo con CIUDAD TV.
El empresario panadero, comentó que previo a esta nueva suba, que en realidad fue en escalada, absorbieron varios aumentos vinculados a la materia prima. Informó que a partir de la semana que viene el incremento rondará entre el 10% y el 15%.
Consultado sobre el movimiento de las ventas en locales, aseguró que “cada año baja más y este año, con el terrible problema que tenemos en el país de inestabilidad, bajaron muchísimo las ventas. Cuesta que un cliente te lleve un kilo de pan, te compran por $100, lo que va a consumir y a veces menos”, graficó.
En su caso particular, la panadería venderá desde la semana que viene a $300 el kilo. “Sé que hay muchos colegas que están en $350 y lo van a llevar a $380. Pero tiene que ver con que los costos son diferentes, influye la materia prima que uno consume y si es una panadería industrial o artesanal”, explicó. Esto en el Gran Resistencia.
Mientras que en el interior provincial “puede llegar a costar un poquito más caro, pero porque la misma materia prima que consumimos acá llega a otros precios, estimo que, por fletes, aunque no descarto que sea por simple especulación porque también suele pasar eso”.