El ministro de Economía, Sergio Massa, anunció la decisión del Gobierno de comenzar un proceso de recompra de deuda externa argentina, en principio por mil millones de dólares. La medida busca dar una señal de confianza a los mercados, tras varias jornadas de suba del dólar paralelo, y despejar el horizonte a largo plazo del endeudamiento.
“Hemos tomado la decisión de llevar un proceso de recompra de la deuda externa argentina por más de mil millones de dólares”, manifestó Massa en un mensaje grabado desde el ministerio de Hacienda.
Dijo que se tomó la decisión “para mejorar el perfil de deuda y seguir bajando el riesgo país”. Agregó que la operación se trata de “un primer paso muy enfocado en los (bonos) globales, sobre todo en los de corto vencimiento”, entre los que mencionó los de 2029 y 2030.
El anuncio de Massa coincidió con la publicación en el Boletín Oficial de la resolución conjunta 1/2023 de las secretarías de Hacienda y de Finanzas del Ministerio de Economía, en la que se detalla los títulos sujetos a la operación de recompra, los Bonos Global 29 y 30.
Reservas robustecidas
Massa hizo el anuncio luego de destacar el “cumplimiento y sobrecumplimiento” de las metas fijadas desde su asunción al frente del Ministerio de Economía, en agosto de 2022. Según precisó, las cuatro premisas eran: orden fiscal, acumulación de reservas, aumento de las exportaciones. desarrollo con inclusión.
“Para 2023 algunas de las proyecciones que teníamos se han visto modificadas”, informó Massa respecto a las condiciones que permiten la recompra de deuda, entre las que mencionó el aumento de precios de algunas exportaciones y los menores niveles de importación de energía previstos.
Además, a la recomposición de reservas de los últimos cinco meses se sumó recientemente la reactivación del swap con China, que permitió ampliar la disponibilidad de divisas que tiene el Banco Central.
Una señal a los mercados en medio de la suba del dólar
La medida anunciada por Massa es un primer paso para ordenar el frente de la deuda externa y apunta en primera instancia a disminuir la presión sobre el dólar, que en los últimos días viene experimentando una subida en sus cotizaciones paralelas debida en gran parte a factores especulativos y políticos.
La suba del dólar blue acumula 32 pesos durante las primeras semanas de enero. Las explicaciones van desde la presión de sectores del complejo agropecuario para recibir una nueva edición del dólar soja hasta una mayor demanda de turistas que salen al exterior. Además, la inestabilidad en el mercado cambiario es alentada por la oposición política-mediática, que en forma abierta combate la estrategia de control de precios. En paralelo, algunos sectores productivos y comerciales remarcan por las dudas cuando sube la cotización del dólar marginal.
La recompra de deuda puede funcionar en tres niveles: mejorar las cotizaciones de los bonos, con la consiguiente baja del riesgo país, frenar la suba de los dólares financieros y tratar de desinflar al blue.