Paula Ojeda, coordinadora de MuMaLa Chaco, informó que en “este primer mes del 2023 el observatorio registró 30 muertes violentas de mujeres, travestis y trans. Una cada 24 horas”.
“En este nuevo año, y ante las cifras de la violencia femicida que no cesa, seguimos exigiendo la declaración de Emergencia en Violencia de Género que determine recursos precisos y especiales, así como evaluar su impacto”, sostuvo la referente MuMaLa.
Asimismo, alertó sobre “una dinámica social persistente y en crecimiento como es la feminización de la pobreza que profundiza las violencias que atravesamos mujeres y disidencias. Con una inflación cercana a los 3 dígitos, con creciente desocupación y subempleo, se nos impide la autonomía económica y el acceso a los recursos básicos generando dependencia con nuestro agresor. Las barreras económicas, sociales, culturales y de acceso a la justicia son las causantes del empobrecimiento de nuestra calidad de vida, el Estado es responsable. Nos mata el machismo, Nos golpea la pobreza”.
Ojeda remarcó que se exigen “políticas de calidad, integrales y territoriales que permitan el acceso a vidas dignas y libres de violencias”.
Informe del observatorio
De acuerdo con el informe del observatorio de MuMaLa, se registraron 22 femicidios, femicidios vinculados y trans- travesticidios, es decir un femicidio cada 33 horas de los cuales: 19 fueron directos; uno vinculado niña/mujer; uno vinculado de niño/varón; un trans/travesticidio.
A estos casos se suman ocho muertes violentas asociadas al género que permanecen en investigación. En tanto, fueron 50 los intentos de femicidios. Es decir, dos intentos por cada femicidio perpetrado.
Entre los datos destacados, el análisis indica que 22 niños y adolescentes se quedaron sin madre. El 76% de los femicidios fue cometido por parejas o exparejas de las víctimas cuya edad promedio fue de 38 años.
Además, el 18 % de las víctimas habían denunciado a su agresor y contaban con orden de restricción de contacto o perimetral. El 30 % de las que denunciaron tenía, además, botón antipánico.
70% de los femicidios fueron cometidos en la vivienda de la víctima o compartida con su agresor.
